Un barco delante de casa: Hanjin ó las cosas no pasan porque sí.

Algunos ya debéis saber que una de las principales empresas de transporte marítimo del mundo ha quebrado.

Eso es como si nos dijeran que Carrefour, ha quebrado. Cada una en su sector, claro está.

Decimos pues que, la empresa sur-coreana, una de las primeras del mundo en el transporte de mercancías vía marítima, quiebra y deja en alta mar a 80 porta-contenedores, de los 97 de su flota, puesto que el miedo a la falta de liquidez ha hecho que algunos puertos impidieran la entrada de éstos. Por suerte, sobretodo para los marineros(que estaban a punto de quedarse sin provisiones y avituallamiento) algunos puertos han desbloqueado la situación. Otros de los que estaban temblando ante este suceso eran los clientes y proveedores que habían comprado y vendido las mercancías( perecederas también) que estaban a bordo de los buques.

Algún conocido nos ha comentado estas semanas: ” tengo un barco parado delante de casa, lo veo desde el balcón…” Esto sucede en el Maresme, Barcelona. Cierto es que un buque de Hanjin estaba parado enfrente de la costa de Barcelona.

Como siempre. todo tiene su razón. Como sabéis algunos que nos seguís, el Baltic Dry Index no es en nada alentador. Lleva tiempo, años, indicando que no se está produciendo esta esperada y prometida recuperación económica. Sus niveles, los mismos que hace 30 años, casi, distan mucho de os cercanos años 2010, 2011 o 2012, en plena crisis.

Pero ¿qué explica tal cataclismo empresarial? Nosotros no pretendemos ser ningunos gurús de nada, pero todos podemos llegar a ciertas conclusiones:

• La crisis es global, persistente y no ha mejorado demasiado la situación desde hace años(salvo en España, el milagro español, que otro día comentaremos)
• Las empresas del sector llevan tiempo ajustando mucho los precios porque la demanda ha bajado.
• Las empresas exportadoras e importadoras ha sometido a una rebaja de precios a los transportistas, puesto que las ventas les han bajado a ellos también.
• Las grandes navieras solo se dedican a construir nuevos buques y más buques.
• Estos buques, a su vez, son cada vez más grandes, pueden transportar más contenedores, más graneles…
• Por lo tanto, no son necesarios tantos buques como los existentes. La flota mundial de buques mercantes está sobre-dimensionada.

En definitiva, ¿a qué nos lleva todo ello? Pues a que, incluso in gigante del transporte marítimo, después de reducir sus márgenes, después de perder cuota de mercado, después de sufrir como todo hijo de vecino, no haya podido aguantar más esta situación.

El Comercio mundial no presenta un aspecto demasiado alentador.

Pero ¿servirá de algo todo lo que está pasando? Bueno, por lo pronto, las empresas que no han estado haciendo bien las cosas, que no tienen colchón financiero, que no han sabido reconducir la situación, se verán inmersas en situaciones como la de Hanjin u otras similares. Se cree, que todo esto servirá para dimensionar el mundo del transporte internacional de mercancías, de nuevo, a los niveles que el mercado, que el “mundo”, en definitiva, pueda asumir.

Esperemos que al salir al balcón, o sacar la cabeza por la ventana, lo próximo que alguien diga que ve no sea un avión en un descampado…